Con una aceptación del 65%, el nuevo presidente de Brasil,  Jair Bolsonaro, asumió este martes su mandato con el compromiso de gobernar “sin discriminación o división”.

El capitán de la reserva del Ejército ganó las elecciones en octubre con 55% de los votos y gobernará al país más grande de Sudamérica hasta el 1 de enero de 2023.

En su primer discurso ante el pleno del Parlamento, Bolsonaro aseguró que liberará al país “de las amarras ideológicas, con un pleno respeto a las religiones y a las tradiciones judeocristianas”.

“Convoco a cada uno de los congresistas a ayudar en la tarea de liberar definitivamente al país del yugo de la corrupción, de la violencia, de la sumisión ideológica”, dijo el líder de ultraderecha.

Su gobierno promete ser una oportunidad para “combatir la ideología de género” y otros trazos que, en su opinión, imprimieron en la sociedad y la política los anteriores gobiernos de Lula da Silva y Dilma Rousseff.

Hamilton Mourao, es el flamante vicepresidente, quien llevará la disciplina militar al gobierno. Mourao, de 65 años y natural de Porto Alegre, comparte con Bolsonaro su nostalgia por la dictadura militar que gobernó el país entre 1964 y 1985. Protagonizó la campaña electoral por sus polémicas declaraciones de tinte conservador, ultraderechista, machista y racista.

Otra de las figuras, discreta y de fuertes convicciones religiosas, fue la primera dama de Brasil, Michelle Bolsonaro, quien está dispuesta a atender “el mayor número posible” de programas sociales del gobierno que ahora comanda su esposo.

En su primer discurso, Michelle de Paula Firmo Reinaldo, de 36 años, se dirigió a los brasileños en el lenguaje de señas y prometió que “las personas con discapacidades serán valoradas”. “Las elecciones dieron voz a quien no era escuchado y la voz de las urnas fue clara: el ciudadano brasileño quiere seguridad, paz y prosperidad”, afirmó la primera dama, quien es intérprete del lenguaje de señas.

El presidente estadounidense, Donald Trump, se hizo presente a través de un tuit: “Felicitaciones al presidente @JairBolsonaro que acaba de hacer un gran discurso de inauguración. ¡Estados Unidos está con usted!”.

El presidente de Bolivia, Evo Morales, uno de los mandatarios que asistió a la ceremonia de posesión, reafirmó las relaciones con Brasil como “socios estratégicos que miran el mismo horizonte de la Patria Grande”.

Unos 12.000 efectivos de  seguridad se desplazaron en Brasilia para garantizar la seguridad durante la investidura de Bolsonaro.

Extraído de El Telégrafo