El Pleno del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) aprobó hoy el padrón electoral que será empleado en las Elecciones Congresales Extraordinarias del 26 de enero de 2020, el cual comprende a 24 799 384 electores hábiles tanto en el país como en el extranjero.

De acuerdo con el documento aprobado dentro del plazo establecido por ley, 974 230 ciudadanos peruanos que residen en el extranjero están habilitados para concurrir a las urnas y elegir a sus respectivos legisladores.

Asimismo, 12 881 163 son mujeres, lo que representa el 50.36 por ciento de la población electoral, mientras que 12 311 221 son hombres (49.64%). En tanto, 6 937 424 son jóvenes entre 18 y 30 años de edad (27.97%).

Los departamentos que concentran la mayor cantidad de sufragantes son Lima con 8 199 141, La Libertad con 1 399  522, Piura con 1 365 687, Arequipa con 1 126 167 y Cajamarca con 1 079 203. En tanto, las circunscripciones con menos electores son Madre de Dios (113 266), Moquegua (145 682) y Tumbes (164 881).

En el caso de Lima Metropolitana, el padrón aprobado por el Pleno del organismo electoral precisa que están habilitados para sufragar 7 446 852 ciudadanos.

Previo a la aprobación del padrón, la Dirección Nacional de Fiscalización y Procesos Electorales del JNE desarrolló un exhaustivo e intenso trabajo de fiscalización del padrón inicial de electores remitido por el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec).

El propósito de la labor de campo fue contrastar la información recibida y detectar si existían errores en los nombres de los electores, si residen efectivamente en esas zonas o si algunos de ellos ya han fallecido.

Al culminarse este trabajo, el JNE remitió al Reniec las observaciones en la lista del padrón inicial a fin de que sean subsanadas por esta entidad.

La fiscalización del padrón electoral se hace en cumplimiento de los lineamientos establecidos por la gestión del titular del JNE, doctor Víctor Ticona Postigo, con la finalidad de verificar la legalidad de los procesos electorales y, de ese modo, asegurar que las votaciones reflejen fielmente la voluntad popular.